Presentación
Una escuela de periodismo
Forma parte del alma de Nuestro Tiempo ser una escuela de futuros periodistas. Esta es una realidad que puede pasar desapercibida para los lectores pero no para quienes visitan nuestra redacción y constatan el permanente ir y venir de alumnos, cargados de ideas, propuestas de reportajes, anécdotas o necesitados de consejos para superar las dificultades que encuentran en sus primeras incursiones profesionales. Junto a los profesores de la Facultad de Comunicación, quienes trabajamos en la revista procuramos brindarles apoyo y orientación. Esta modesta contribución de nuestra parte nos hace sentirnos partícipes de los éxitos profesionales que ellos van alcanzando en su camino. Pocas cosas dan más orgullo que confirmar que esos esfuerzos se traducen en resultados fructíferos, pequeñas victorias, triunfos personales que se atesoran y se comparten con los más queridos y cercanos.
Entre esos éxitos, cabe destacar el reportaje “La antesala de la libertad”, escrito por la alumna de cuarto de periodismo Ujué Lorente, que destacamos en nuestra portada. Muy interesante y bien escrito, arranca con un testimonio que nos recuerda que nadie puede considerarse completamente exento de caer entre rejas, para luego describir su experiencia de dos días conviviendo con los presos del “Módulo de Respeto” de la cárcel de Burgos. También en este número, Cristina Graell, alumna de tercero, ha reconstruido con detalle la crisis de los misiles que en 1962 puso al mundo al borde de la III Guerra Mundial. Y Blanca Rodríguez y Javier Robles, estudiantes de la doble licenciatura de Historia y Periodismo, han documentado la historia de los premios Nobel para arropar la crónica de Reyes Calderón.
No es esta la primera ni la última vez que nos sorprendamos con el buen trabajo de alguno de nuestros alumnos. Sin embargo, sí puede ser esta la primera oportunidad para adentrarnos en un territorio aparentemente hostil y lúgubre, que adquiere cotas de desconocida humanidad gracias a Ujué.