
Dirección y guion: Avelina Prat
España, 2025
Cine contemplativo.
La vida de Fernando, catedrático de Geografía, se detiene cuando su esposa, una mujer inmigrante serbia, desaparece sin explicación. Roto por dentro, decide también huir y asumir la identidad del jardinero de una finca portuguesa.
La cineasta valenciana Avelina Prat aborda en su segundo largometraje algunos de los temas que trató en Vasil: los problemas que implica la migración y la importancia de la identidad, del sentido de pertenencia y de las raíces familiares. Como entonces, encontramos también personajes frágiles que buscan el bien desde su precariedad emocional. Aunque el arranque resulta excesivamente lento y críptico y las elipsis debilitan el retrato de los personajes, el relato gana emoción con el paso de los minutos y el tramo final es notable. Construida con miradas y detalles, Una quinta portuguesa requiere de un espectador acostumbrado a ver cine. No es una película para un público general, pero cualquier cinéfilo la disfrutará mucho