
John Henry Newman
Encuentro, 2025
560 páginas, 23,56 euros
Por primera vez, y nítidamente traducidos y aclarados con notas, y enmarcados en su coyuntura y proceso histórico, se reúnen todos los papeles que sobre el estilo de ser universitario, sobre esa institución académica y en torno a la educación superior dejó escritos en siete años cruciales (1851-1858) John Henry Newman: La idea de la universidad.
Se ofrecen en quinientas sesenta juiciosas páginas, sutiles páginas todavía con vida y provechosas, dos extensas partes: «La enseñanza universitaria» y «Temas universitarios». Newman, canonizado por el papa Francisco en 2019, abrazó la fe católica en 1845, con más de cuarenta años. Supuso para él una larga búsqueda de corazón y raciocinio cuando era presbítero anglicano.
Los nueve capítulos iniciales agrupan discursos pronunciados en Dublín ante un público que el conferenciante desconocía. No obstante, Newman, razonador, enlaza reflexiones históricas y experiencias anteriores y temas controvertidos, como la inveterada dicotomía entre si se deben impartir en los campus estudios utilitarios o no tanto, o si debe mantenerse la hegemonía de lo confesional en las aulas o qué papel ejercen la incredulidad y el escepticismo.
Newman defiende la educación liberal, entendida como «el saber por el saber», apoyándose en lo humanista de los griegos y Roma con el objetivo de formar caballeros de porte y talante respetuoso («educamos como preparación para el mundo»). En el volumen resalta una noción decisiva y conocida de este pensador cristiano: la universidad es a la vez el ámbito del saber universal y de la dedicación a la sociedad cercana.
Destaca en Newman la convicción que vertebra su obra: la soberanía de la verdad y su búsqueda —con esfuerzo y estudio— y la conexión entre pensamiento y lenguaje, desarrollada en la segunda parte del libro, aplicado a facultades universitarias distintas.
Pero el medio millar de páginas certifica la dificultad de condensar sus ideas capitales: son los matices y la fluidez de pensamiento, con las ventajas de su ingenioso humor, lo que sobresale en esos caudalosos párrafos newmanianos.