BBC One (2014-2023)
Emisión en España: Movistar
Guionista: Sally Wainwright
3 temporadas de 6 episodios cada una
Una virtud de lo bueno es saber hacerse esperar. Partiendo del proverbial buen hacer británico, la peripecia de producción de Happy Valley resulta inusual: tres exitosas temporadas de seis episodios cada una, pero con un largo hiato de siete años entre la segunda y la tercera. Esa larga espera ha hecho que esta última y definitiva entrega ostente más fuerza, al aunar el aroma de la nostalgia con la rotundidad de la despedida. ¡Vaya final!
Catherine Cawood, la brava abuela coraje que protagoniza esta portentosa historia, está ahora a unos días de jubilarse. Pero no, su último caso no será plácido. Al contrario. A ella, que ha mirado tantas veces al horror cara a cara, le toca simplemente seguir realizando su trabajo. Como otras veces, por este nublado condado de trabajadores de Yorkshire ronda el asesinato, la mezquindad, las familias rotas y la manipulación emocional; mas también la valentía, el deseo de justicia y la luz al final de túnel.
Como no podía ser de otra manera, el fantasma de Tommy Lee Royce, el malnacido que dejó embarazada a su hija y propició su muerte, reaparece en escena para fundir el conflicto policial con el familiar. En esa agónica intersección es donde la guionista Sally Wainwright exhibe una profundidad dramática sobresaliente, coloreando de gris asuntos tan intrincados como la adicción, la culpa, la paternidad o la lealtad. Porque los personajes de esta joya de la BBC son contradictorios y heroicos, villanos y con corazón. La mayor genialidad de la serie es no juzgarles, sino tratar de evidenciar la complejidad del alma humana, dando razones de la existencia del mal, sin justificarlo, y los obstáculos del bien para combatirlo. Por eso, y por unas actuaciones soberbias, Happy Valley rezuma tanta autenticidad.
Wainwright retrata un universo duro, donde hay gentes que dan un mal paso y se condenan, mientras que otros encuentran el consuelo de la redención tras una existencia flirteando con el desastre. Es ahí donde se levanta, esplendorosa, la referencia bíblica del título: esta vida puede ser un valle de lágrimas, sí, pero por el que merece la pena luchar hasta el final. En esa batalla habitan el heroísmo y la felicidad.