«El sentido de la vida se encuentra a través del sufrimiento»
A los diecinueve, Arthur C. Brooks dejó la carrera, se dedicó a tocar la trompa y se definió de izquierdas. Doce años más tarde, el amor de Ester, su mujer, y la vuelta a los libros dieron un giro a su vida. Hoy lo consideran uno de los intelectuales más influyentes de la derecha estadounidense. ¿Su objeto de estudio? La felicidad.